Tus muebles es un parque de diversiones para tus gatos, probablemente no estés muy impresionado cada vez que descubras una parte de tu sofá destruido por tu compañero felino. Estos consejos te ayudaran a enseñarle a tu gato los lugares apropiados para arañar y así evitar la destrucción de tus muebles.
Entrenamiento: Juguetes para gatos
No puedes entrenar a tu gato como a un perro, pero es posible enseñarle el comportamiento apropiado. Los gatos no responden bien a ordenes, ni gritos, es mejor enseñarles que juguetes y objetos son apropiados para jugar. Si tu gato comienza a arañar tus muebles distraelo con un juguete. Después de que el juguete capte su atención, lleva a tu gato al lugar que tiene destinado para que realice la actividad del rascado. Continúa jugando con el juguete en la parte superior del rascador para alentar a tu gato a usar sus garras en esa área. Tendrás que repetir esto cada vez que tu gato comience a rascar los muebles. Tomará tiempo y paciencia, pero tu gato pronto aprenderá a buscar juguetes y el rascador cuando se sienta jugueton.
Áreas de rascado alternativas
Debes configurar algunos postes o almohadillas para rascar alrededor de su casa. Colóquelos en áreas que tengan muebles que atraigan a su gato y en áreas donde sus gatos pasen mucho tiempo. En general, los gatos disfrutan de postes altos con material que pueden rasgar con sus garras. ¡Por eso les gustan tanto tus muebles! Proporcione a su gato algunas alternativas de muebles para gatos para que puedan participar en su comportamiento natural de arañazos sin arruinar sus muebles.
Haz que tus muebles no sean atractivos para tus gatos
Las tácticas de aversión también valen la pena al comienzo de tu proceso de entrenamiento. Estas son adiciones poco atractivas que puedes agregar fácilmente a tus muebles para disuadir el interés de tu gato en ellos. Coloque cinta adhesiva de doble cara debajo de sus muebles para evitar que su gato los arañe. A los gatos no les gusta la textura pegajosa en sus patas, por lo que esta punta los alejará asqueados. También puede aplicar un aerosol cítrico a los muebles que es probable que arañen. A muchos gatos no les gusta el olor a cítricos y lo evitarán. Considere colocar una sábana liviana sobre los muebles para proteger la tela. Los gatos generalmente no disfrutan rascarse ese tipo de material. Es importante asegurar la sábana firmemente contra los muebles para disuadir a los gatitos juguetones de investigarla.
Siguiendo estos consejos, tu gato puede disfrutar de todos los rasguños que desee, y puede sentirse seguro al saber que sus muebles no sufrirán daños. La primera semana tomará un poco de paciencia ya que le dará tiempo a su gato para aprender lugares apropiados para jugar y rascarse.